Debido al gran volumen de información que existe en toda organización, es necesario el manejo de formas para homogeneizar y racionalizar el trabajo.
La eficacia con la que
se atienden los aspectos relacionados con las formas en una institución, repercute directamente en la fluidez y precisión con que puede hacer frente prácticamente a todos los asuntos relacionados con la ejecución de funciones, instalación y operación de sistemas, desarrollo de procedimientos, prestación
de servicios
y/o venta de productos.